Por Paul Wiseman - The Associated Press
Estados Unidos volvió a registrar un buen mes en cuanto al empleo, al crear 206,000 nuevos puestos de trabajo en junio, demostrando una vez más la capacidad de la economía para soportar las aún elevadas tasas de interés.
El crecimiento del empleo el mes pasado supuso un retroceso respecto a los 218,000 puestos de mayo. Pero aun así significa un sólido aumento, que refleja la resistencia de la economía, impulsada por el consumo, que se está ralentizando pero sigue creciendo a un ritmo constante.
El informe del Departamento de Trabajo de este viernes también mostró que la tasa de desempleo subió del 4% a un todavía bajo 4.1%.
El estado de la economía pesa mucho en la mente de los votantes, a medida que se acercan las elecciones generales. A pesar de las constantes contrataciones, los relativamente escasos despidos y el enfriamiento gradual de la inflación, muchos estadounidenses siguen descontentps con los precios aún elevados y culpan de ello al presidente, Joe Biden.Los economistas han ido pronosticando repetidamente que el mercado laboral perdería impulso ante las elevadas tasas de interés impuestas por la Reserva Federal, sólo para ver cómo los aumentos de la contratación mostraban una fuerza inesperada.
Aun así, hay indicios de desaceleración económica ante la serie de subidas de dichas tasas. El producto interno bruto estadounidense —la producción total de bienes y servicios — creció a un aletargado ritmo anual del 1.4% entre enero y marzo, el ritmo más lento para un trimestre en casi dos años.
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El gasto de los consumidores, que representa alrededor del 70% de toda la actividad económica de Estados Unidos y que ha impulsado el crecimiento en los tres últimos años, aumentó sólo un 1.5% el trimestre pasado, tras haber crecido más del 3% en cada uno de los dos anteriores. Además, el número de ofertas de empleo anunciadas ha disminuido de forma constante desde que alcanzara un récord de 12.2 millones en marzo de 2022.
Sin embargo, aunque los empleadores no estén contratando tan agresivamente después de haber tenido dificultades para cubrir puestos de trabajo en los últimos dos años, tampoco están recortando muchos empleos. La mayoría de los trabajadores disfrutan de un nivel inusual de seguridad laboral.
Durante 2022 y 2023, la Fed incrementó su tasa de interés de referencia 11 veces para tratar de vencer la peor racha de inflación en cuatro décadas, elevando su tasa clave a su punto más alto en 23 años. Se preveía que las elevadas tasas de interés para consumidores y empresas desencadenarían una recesión. No ha sido así. La economía y el mercado laboral han mostrado una sorprendente resistencia.
Mientras tanto, la inflación ha descendido de forma constante desde un máximo del 9.1% en 2022, hasta el 3.3%. En declaraciones realizadas esta semana en una conferencia en Portugal, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, señaló que el aumento de los precios en Estados Unidos se estaba desacelerando de nuevo tras los informes preocupantes de principios de año.
Sin embargo, advirtió, se necesitaan más pruebas de que la inflación se está acercando al objetivo del 2% de la Fed antes de que el organismo comience a bajar las tasas.